La revalorización de la investigación
La revalorización de la investigación

En el día del investigador científico, representantes de la UNLZ analizan el rol de la ciencia en la sociedad, el papel de la Universidad como generadora de conocimiento y los aportes de sus respectivas disciplinas al desarrollo social.
Cada 10 de abril nuestro país celebra el Día del Investigador y la investigadora Científicos en honor al nacimiento de Bernardo Houssay cofundador del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET) y merecedor del premio Nobel de Medicina y Fisiología en 1947.
En plena Pandemia por el Coronavirus Covid19, científicos y médicos en todo el mundo trabajan a contrareloj para hallar una droga para su tratamiento y una vacuna para frenar su avance. En ese contexto, los ojos de los medios y la sociedad están puestos en su labor.
Así, el rol de los investigadores, en particular en este momento, comienza a ser revalorizado, se empieza a poner en valor el trabajo intelectual, la investigación, la ciencia, la medicina, coinciden Gustavo Carrizo Adris y Juan Manuel Telechea, docentes investigadores de las Facultades de Derecho y Ciencias Sociales, respectivamente.
Fernando Massaro, de la Facultad de Ingeniería, agrega: la sociedad está percibiendo la importancia y el valor que tiene la ciencia para el sostenimiento de la vida. Espero que en un futuro cercano, se comprenda que también lo es para alcanzar una “calidad de vida” que sea sostenible. Si elegimos ese camino, entonces, la lógica con la que funcionan muchas cosas a nuestro alrededor va a empezar a cambiar para bien”.
Para Marcela Lépore, investigadora de la Facultad de Ciencias Económicas “el avance en las comunicaciones está cambiando la importancia dada al investigador científico, los estudios lo demuestran, la ciudadanía valora muy bien las profesiones relacionadas con la ciencia y la tecnología”.
En la misma línea Cyntia Szemruch, de la Facultad de Ciencias Agrarias, considera que “En los últimos tiempos aumentó la difusión sobre estas actividades con publicidad, muestras y aplicaciones directas. Estimo que esto ayuda a saber más acerca de la importancia y utilidad de su rol para la sociedad”.
Los aportes de cada disciplina
La tarea de los docentes investigadores es un aporte al desarrollo del conocimiento y de la sociedad en general. En este contexto, desde el Laboratorio de Medios Filtrantes y Aguas (LMFA) de la Facultad de Ingeniería están trabajando en un proyecto del área de medios filtrantes para desarrollar nuevas tecnologías médicas. “En particular, esos conocimientos los estamos ‘reciclando’ para lograr equipamiento médico de alcance masivo que permita destruir el virus y evitar su propagación en forma masiva antes que entre en contacto con las personas, especialmente en los principales puntos fijos y móviles de concentración comunitarios”, detalla Massaro.
Por su parte, Telechea puntualiza que en este momento desde la economía, su campo, se “trata de identificar correctamente los problemas y los cuellos de botella que se producen con la aplicación de la cuarentena y para corregir rápidamente donde se pueda”. “También se dan recomendaciones de política económica para salir rápidamente de esta situación una vez que se termine el aislamiento”.
Las vocaciones tempranas
Para Massaro “las vocaciones muchas veces surgen a partir de la motivación que podemos hallar frente a situaciones disruptivas. Seguramente esta pandemia, además del drama, como contrapartida va a motivar a muchos jóvenes a querer hacer algo positivo para evitar que esto suceda nuevamente, ya sea en áreas que nos ayuden a mantenernos con vida, como la medicina y la salud en general, así como en las ingenierías y tecnologías que nos ayuden a mejorar nuestra calidad de vida de una forma sostenible”.
En esa línea resalta que “lo importante es que podamos canalizar esas vocaciones tempranas y que podamos formarlos para que en el futuro puedan ser protagonistas de las soluciones, en vez de ser espectadores de los problemas”.
Para la investigadora de la FCA “la universidad cumple un rol fundamental en el fomento de las vocaciones científicas”. “Mediante las Becas CIN los alumnos de la carrera de agronomía se incorporan en un grupo o proyecto de investigación. Esto les permite tomar contacto directo con las actividades de investigación y contribuye a despertar su vocación”, afirma.
El rol de la Universidad en la generación de conocimiento
Los investigadores coinciden en señalar el rol central de las instituciones de educación superior en la generación de conocimiento. “Esto es imprescindible para el progreso de la sociedad y la encargada de esta tarea no es ni más ni menos que la Universidad”, remarca Lepore.
El docente de la FCS añade que “la Universidad tiene mucho potencial para aprovechar aún más, por ejemplo generando un mayor vínculo entre universidades y con el sector privado”.
Finalmente, Carrizo Adris señala que la UNLZ le otorga un lugar primordial: “Tiene en claro que su rol no es sólo dar clases sino también generar desarrollo científico, y hacer aportes a la comunidad para su desarrollo”, concluye.
Perfiles
Cyntia Szemruch es Doctora en Agronomía, Especialista en Calidad y Tecnología de Semillas, Producción de oleaginosas. Integra la cátedra de Oleaginosas de la FCA UNLZ.
Marcela Lepore es Doctora en Economía. Desarrolla investigaciones sobre Responsabilidad Sociales Empresaria y se desempeña en la cátedra Principios de Administración de la FCE UNLZ.
Juan Manuel Telechea es Magíster en Desarrollo Económico e integrante del Instituto de Trabajo y Economía (ITE). Se desempeña en la cátedra de Economía General de FCS UNLZ.
Gustavo Carrizo Adris es Doctor en Derecho. Tiene un Postdoctorado en Derecho Internacional Privado y se desempeña como titular de la Cátedra de Derecho Internacional Público de la FD UNLZ.
Fernando Massaro es Doctor en Ingeniería y director del Laboratorio de Medios Filtrantes y Aguas de la FI UNLZ.